5/10/07

Deportes: off side del progreso

Mi generación, la que nació entre el 80 y el 85, es decir, la que dio sus primeros pasos en los últimos años de la Dictadura y cogió uso de razón política, obviamente difusa por la edad, con el plebiscito del ’88, ha crecido siendo victima del progreso.
Desde que Pinochet dejó La Moneda, incluso antes, la sensación de que el país cambiaba para bien se nos inculcó de manera patológica y año tras año los datos macroeconómicos lo confirmaban. Estábamos y estamos mirando el futuro con la seguridad de que al final del camino está el edén: el desarrollo de corte occidental (¿Existe otro?). Paradójicamente, el “vamos bien, mañana mejor” que instauro Pinochet el año 1980 para aprobar su rocambolesca Constitución, encaja a la perfección con lo vivido y proyectado en los ´90.
Pero dentro de los variados estamentos en que la prepotencia del progreso globalizador ha arrasado -infraestructuras, consumo, energía, tecnología- muchas facetas del Chile de hoy han quedado fuera. Muchas. Demasiadas, pero no es mi intención abarcar todos los desastres del neoliberalismo, sino hablar de deportes.
Increíblemente los deportes en Chile han sido más sensatos que la realidad mediática. Sentía cuando era pequeño, más por la edad que por otra cosa, que esa sensación de progreso que escupía la TV y los diarios también aupaba a los deportes. En los 90 Chile cosechó éxitos que hacían pensar que quizás, tal vez, esa proyección infantil era algo tangible: Colo Colo ganó la Libertadores, el Chino Ríos fue uno del mundo, clasificamos al Mundial de Francia, luego el bronce fútbol en Sydney 2000, después el doble oro en tenis en Atenas, campeones mundiales de hockey femenino... en fin hechos, títulos, logros admirables, pero aislados.
Culpar a alguien en concreto es pretencioso y dudo que una Digeder bien administrada o un Chiledeportes fumigado de mafiosos hubiera cambiado el panorama actual, pero el lícito quejarse del descaro y desinterés de nuestra elite política para con los deportes. El ejemplo sin duda es Chiledeportes y no por ser un nido de corrupción asignando proyectos a políticos en campaña, sino porque cuando se reformuló la Digeder y se creó Chiledeportes se dejaron evidentes lagunas legales que posibilitaron los actos delictivos. En fin... todo esto lo intuyo, no me conozco la ley del deporte al dedillo, pero si tengo claro que el deportes no es rentable políticamente en el corto plazo.
Lo que si es evidente es que los logros deportivos crean una marca, una identidad un reafirmamiento total del Estado.


No nos ubica ni Dios
He comprobado en mis 11 meses en Madrid que Chile no hace noticia. Salvo por Pinochet es poco lo que se sabe de Chile en Europa lo que en su trasfondo es positivo: no hacer noticia significa que no hay malas noticias (aún cuando la pauta editorial del grupo PRISA imponga lo que es noticia en Latinoamérica). Sin embargo esa orfandad informativa va de la mano con la escasa figuración internacional que tiene Chile. No sólo produciendo malas noticias se sale en los periódicos o en la TV, lo que significa entrar en el inconsciente colectivo de la gente, sino también en los dos únicos sitios donde las naciones chocan y no hay sangre (aunque no siempre es así): la cultura y el deporte. Vuelvo a repetir que no es mi plan abarcar en este BLOG muchos puntos, sólo el banal y querido deporte...
Hace unas semanas vi en la DOS el mundial de gimnasia rítmica. Lo empecé a ver cuando estaba terminando la competencia por equipos y las rumanas lloraban por perder el oro. La cámara hizo una panorámica del recinto y comenzaron a salir las puntuación. Asombrado vi que participaron más de 40 equipos. Los primeros diez eran los de siempre: Rumania, Rusia, EE.UU., China, Alemania, España... en fin, no recuerdo cuales más. Luego Suecia, Suiza, Inglaterra, Brasil, Tonga ¿Tonga? Sí, Tonga, después Japón, Turquía, México... La cuadragésimprimera bandera que apareció en la pantalla, con el puntaje más bajo, era la chilena. No espera verla, no pensaba que habría un equipo de gimnasia rítmica que acudiera al Mundial, pero a pesar del último lugar me pareció importante y relevante ver la bandera ahí. A veces el deporte no está para alcanzar logros competitivos sino para que el país esté...aparezca...figure.
Argentina es Argentina no porque en 1945 fuese la novena potencia del mundo, sino porque tiene una selección competitiva en todas las disciplinas por equipos y cualquier nación del mundo la ha enfrentado en alguna de esas disciplinas, seguramente perdiendo.
Si al menos Chile pudiera tener una selección de baloncesto de nivel medio, si alguna vez pudiéramos ganarle a Uruguay y clasificar al mundial de Rugby, si alguna vez ganamos el mundial de hockey masculino, si alguna vez tenemos un atleta que clasifique a algunas de las finales del mundial de Atletismo, si alguna vez se cuela un chileno en la F1...podríamos aspirar a ser reconocidos en el mundo lo que es primer paso para crear un identidad común. Desde Arica a Magallanes, desde La Dehesa hasta La Viuda 9. Una identidad común.
Es pretencioso. No sé como se logra. Lo único que sé es que si las platas de Chiledeportes asignadas a la asociación deportiva del barrio X, para comprar un equipo de tenis de mesa, deberían llegar, porque supongo que de 100 niños que jueguen tenis de mesa uno saldrá bueno... (asumo el simplismo de la última frase).

Espero que el plan ADO que quiere instalar o está instalando el COCh, ese que hizo que España dejase de ser un país del montón (sumado eso si con los JJ.OO de Barcelona ’92), logre los objetivos antes descritos: no ganar, sino estar. Estoy seguro que a medida que se repita lo segundo llegarán los triunfos.

4 comentarios:

  1. Precis som vi pratade om tror jag att problemet ligger i avsaknad av vana, att föreningsslivet inte har ingått i kulturen. Sverige är ett land med färre invånare än Chile, men trots det har fött fram ett antal goda idrottsmän. I Sverige går idrottskulturen hand i hand med socialismen, och sedan socialismens genombrott i början på 1900- talet har föreningslivet varit vida utbrett i Sverige. För många föräldrar fortfarande idag, av tradition, är det viktigt att barnen utövar någon sport, det får vara vad det vill så länge det är någon sorts sport. Alltså växer många, om inte de flesta, barn i Sverige upp med idrott, och jag tror att det är häri som skillnaden liggen från Chile.
    En Suecia el deporte va de la mano del socialismo, a lo mejor por eso Suecia ha tenido algunos deportistas buenos aunque es un pais poco poblado.

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  2. hermano, no pongas tus esperanzas en el plan ADO ¿cuándo hemos dejado de ser un país del montón? si, somos una potencia en piragúa y no se que más deportes estupidos, pero cambiaba todo por llegar a semifinales de un mundial de futbol... bueno, no. A los chicos de baloncesto no les cambio.

    PD: no queda nada para vernos en Belfast

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  3. Si es que no puede ser, tendriais que ser como los vascos, que invitaron a la seleccion de Euskadi durante una temporada a participar en la liga mexicana y la ganaron. Si no mira cuando han venido los mayores exitos de la seleccion de los ultimos anios: con Clemente (vasco) y su equipo, que eran la mitad vascos y la otra mitad catalanes, todos ellos del barca... Desde que llegaron los madridistas, nada (ni con Camacho :P)

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  4. hombre, eso es lo que pasa cuando eres vasco: si no te gusta la historia, pues la reinventas, que coño. Aver, contemos los éxitos de Clemente: 0, últimas ligas ganadas por el Athletic:0, últimas de la Real Sociedad: hay una esperanza de que ganen la de segunda...con la selección, aparte de ganar una eurocopa en el 64, tuvimos una final jodida por Arconada, portero vasco donde los alla... no jodamos, no jodamos...es lo que tiene que se cedan a las autonomias las competencias de educación, que nos volvemos medio lelos, chato. Si acaso, pues decimos que sois tan mediocres como el resto de España...

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